Si hubiese una biblia empresarial, registrar la marca y el nombre comercial debería ser el primero de sus mandamientos. La inscripción en la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) es la mejor de las maneras de blindar un negocio frente a posibles amenazas de terceros. Ahora bien, ¿la marca y el nombre comercial son lo mismo? La respuesta es sencilla: no.
Como la primera agencia de propiedad industrial 100% gallega, en Alvarez Real tenemos una amplia experiencia en guiar a las empresas para evitarles sorpresas desagradables por un uso incorrecto de la marca o, simplemente, por falta de información respecto al nombre comercial, a lo que hay y no hay que hacer. Nuestro equipo analiza a diario cada caso como si fuera único porque cada negocio o compañía es diferente y confundir nombre comercial y marca es uno de los errores más frecuentes con los que se encuentran en el departamento de Patentes y Marcas.
Pero ¿por qué es tan importante realizar este trámite ante la Administración? Porque el registro otorga a una empresa el derecho exclusivo a impedir que terceros comercialicen productos idénticos o similares con la misma marca o usando una tan parecida que pueda crear confusión en el consumidor. Con el nombre comercial sucede un tanto de lo mismo. Así lo dice la OEPM, que define ambos términos de la siguiente manera:
“La marca y el nombre comercial son signos distintivos que se protegen mediante títulos otorgados por el Estado y que confieren a su titular el derecho exclusivo de utilizarlos en el tráfico económico, e impedir a otros la utilización en España de los signos distintivos protegidos”.
- La marca es un signo que permite a las empresas distinguir sus productos o servicios frente a los productos o servicios de los competidores.
- El nombre comercial es el signo o denominación que identifica a una empresa en el tráfico mercantil y que sirve para distinguirla de las demás empresas que desarrollan actividades idénticas o similares. Identifica actividades empresariales diferenciando unas empresas de otras.
Dicho de otro modo, el nombre comercial alude a la empresa y la marca a un producto o servicio de una empresa. En ocasiones ambas denominaciones coinciden y en otras una marca es tan potente que se ‘come’ a su creadora (ejemplo: ColaCao/Nutrexpa).
¿Cuál es más importante, la marca o el nombre comercial?
Sin duda, el signo distintivo por excelencia es la marca, que también puede traspasar fronteras. Así lo recuerda la Oficina Española de Patentes y Marcas, ya que mientras que la marca sí puede extenderse internacionalmente por procedimientos establecidos vía el procedimiento de registro de la marca internacional o el de la marca europea/ comunitaria, “esto no es posible con el nombre comercial que sólo podría protegerse país por país y siempre de acuerdo con las normas nacionales de cada Estado”, apunta la OEPM.
¿Qué es la denominación social?
Confundir el nombre comercial o la marca con la denominación social es un error muy frecuente hasta el punto de que numerosas empresas están convencidas de que la denominación social ya es suficiente garantía, pero nada más lejos de la realidad, son tres figuras jurídicas diferentes.
Así, la denominación social es el nombre que identifica a una persona jurídica en el tráfico mercantil como sujeto jurídico societario y como tal, posee responsabilidades, derechos y obligaciones. Es el nombre con el que se llevan a cabo los negocios, los contratos y los compromisos jurídicos y se trata de una figura jurídica obligatoria que se solicita ante el Registro Mercantil cuando se constituye una empresa o un negocio. Registrar la marca o incluso el nombre comercial, sin embargo, no es obligatorio por ley.
¿Se registran a la vez o en lugares distintos?
- Las marcas y nombres comerciales se inscriben en la Oficina Española de Patentes y Marcas.
- Las denominaciones sociales de inscriben en el Registro Mercantil Central y los nombres de dominio bajo el «.es» en la Entidad Pública Empresarial Red.es, donde existe la Dirección de Dominios de Internet, conocida como ESNIC. Existen, por tanto, tres tipos de registros para la inscripción de estos signos identificativos con relevancia para la empresa, según explican desde la OEPM.
¿Puede haber dos marcas con nombres iguales?
La normativa actual establece que:
- Pueden coexistir en el registro marcas y nombres comerciales iguales o similares de titulares diferentes, siempre y cuando estén destinados a ámbitos mercantiles distintos y que excluyan el riesgo de error o confusión.
- No es posible la inscripción de una denominación social idéntica a otra anteriormente inscrita, aunque sus actividades mercantiles sean distintas.
- No es posible la inscripción de un nombre de dominio coincidente con otro anteriormente inscrito, sea cual sea la actividad que vaya a desarrollarse con uno y otro.
¿La marca o nombre comercial caduca en el registro?
Sí. La propiedad de los distintivos dura diez años desde la fecha de solicitud en la OEMP. A partir de este período la marca y/o el nombre comercial deben renovarse por otros diez años y así sucesivamente.
¿Cuánto cuesta registrar una marca o nombre comercial?
El coste por la primera inscripción de una marca o nombre comercial ronda los 145 euros (hay descuentos de un 15% si los trámites se realizan online). A partir de esa primera inscripción, las siguientes rondan los 93 euros.La OMP recuerda que para mantener estos derechos hay que hacer frente a las renovaciones cada diez años. El importe de estas tasas se actualiza anualmente a través de la Ley de Presupuestos Generales del Estado y su montante figura en la página web de la OEPM.